Un poderoso sismo de magnitud 6.9 sacudió este martes la región central de Visayas, Filipinas, dejando al menos 32 personas muertas y 37 heridas, según confirmaron autoridades locales.
La ciudad de Cebú, con casi un millón de habitantes, fue una de las más afectadas. Funcionarios citados por The Philippine Star y The New York Times calificaron el evento como uno de los desastres más devastadores del país en lo que va del año.
El movimiento telúrico provocó apagones masivos y graves daños estructurales: cuatro edificios se desplomaron, tres instalaciones gubernamentales resultaron afectadas y al menos seis puentes y una carretera quedaron inutilizados, complicando las labores de rescate y asistencia.
Las agencias de monitoreo sísmico reportaron que el epicentro se localizó a unos 10 kilómetros de profundidad y se registraron múltiples réplicas, la más fuerte con magnitud 6.
Pese a la magnitud del evento, las autoridades aclararon que no fue necesario emitir alerta de tsunami.