El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó la tragedia derivada del tiroteo en Texas y reconoció que hay entre las víctimas estudiantes de origen mexicano.
“Nacido acá no se sabe. De que son de origen mexicano, no hay duda“, dijo al tiempo de transmitir su solidaridad a las familias de las víctimas.
Quiero, añadió el mandatario, transmitir mi dolor a los familiares de las estudiantes que perdieron la vida y mando un abrazo fuerte a las familias.
Agregó que se tratan de hechos lamentables y por el momento, para no aprovecharse de esta tragedia, no hablará de la demanda mexicana para regular el uso de las armas en los Estados Unidos.
“Nos duele mucho, lo lamentamos. Y no quiero tratar ahora este tema de las armas, por el duelo; no se trata de hablar de las causas y más si es algo que tiene que ver con nosotros. No queremos aprovecharnos de la tragedia”, reiteró.
Al menos 19 niños y dos adultos murieron en la Escuela Primaria Robb, en Uvalde, Texas, según el Departamento de Seguridad Pública de ese estado fronterizo.
El acusado es Salvador Ramos, de 18 años, quien también fue abatido en las escuela, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott.